María Álvarez es estudiante de Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III de Madrid. En su tercer año de carrera, forma parte de un gran proyecto, Hemper, la marca de mochilas que ha revolucionado el campus de Getafe y que apuesta por la originalidad. Esta marca fue una de las candidatas a ganar el premio del evento “Fashionpreneurs”, organizado por la Asociación de Emprendedores (StarUc3m) de nuestra universidad el pasado 2 de marzo.
Entrevistadora: ¿Cómo surge la iniciativa de Hemper?
María Álvarez: Surge a partir de un voluntariado que hicimos en Nepal. Dos de los que conformamos el proyecto, fueron hace tres años, en 2015, por primer vez, para echar una mano tras el terremoto. Allí conocieron a una mujer nepalí, con la que crearon un gran vínculo, y ella les mostró las mochilas que allí se vendían, ya que es muy común en esa zona por el turismo de montaña. Después, volvimos unos cuantos más el año pasado. Y tras conocer el trabajo de las mujeres, pensamos en crear el proyecto. Era una buena forma de seguir vinculados a Nepal.
E: ¿Fue difícil llevar a cabo el proyecto?
MÁ: Si, la gente no es consciente de lo que hay detrás de una marca. En mayo ya abrimos Instagram y la tienda online, y comenzamos a hacer pedidos. Este verano volvimos a Nepal, que es cuando mejoramos toda la comunicación con las mujeres y cuando decidimos hacer el proyecto que es ahora: el de proporcionarles alojamiento, educación a sus hijos y un sueldo digno. También estamos trabajando en otros proyectos sociales, como pintar todo el taller con los motivos de las mochilas. Volvimos en septiembre y ya nos convertimos en sociedad limitada, ahí es cuando dimos el paso definitivo en el que somos empresa de verdad. Pero para nada pensábamos que iba a convertirse en algo tan grande.
“Era una buena forma de seguir vinculados a Nepal. (…) Pero para nada pensábamos que iba a convertirse en algo tan grande.”
E: ¿Qué es lo que mas os llamó la atención del trabajo de estas mujeres?
MÁ: Desde el primer día nos interesamos en los tejidos, las combinaciones de colores de las mochilas, y nos pareció muy interesante hacer un proyecto con eso. La mujer nepalí nos llevó a un taller donde trabajaban mujeres fabricando las mochilas. Nos planteamos personalizarlas y llevarnos algunas hechas por nosotros, con modelos nuestros.
E: ¿Cuál es tu trabajo en el proyecto?
MÁ: Yo llevo las redes sociales, el contenido y la atención al cliente, el ámbito de la comunicación. Pero ahora mismo están muy difusos los puestos. Todos somos estudiantes y tenemos que compaginarlo con los estudios, por lo que nos ayudamos mutuamente. También estoy mucho en marketing, ayudando con las campañas.
E: ¿Crees que hay muchos jóvenes emprendedores hoy en día?
MÁ: Yo creo que el problema es que se ha puesto muy de moda este tema del emprendimiento. Yo concibo el emprendimiento ya no solo como crear tu propia empresa, si no más bien la idea de crear un proyecto. Para mí, emprender es llevar a cabo un proyecto y sobre todo cuando hay un objetivo detrás que no es solo ganar dinero.
E: ¿Qué te pareció que se organizara este evento en la universidad?
MÁ: Me parece maravilloso que se de voz a empresas que poco a poco van creciendo. Pero también se deberían hacer charlas en las universidades sobre el fracaso, porque es tratado como un tema tabú. Cuando abres una empresa, no es tan fácil triunfar. Creo que es muy interesante hablar de eso. A los estudiantes hay que darles una visión de la realidad distinta, decirles que lo intenten pero también explicarles que pueden fracasar, ya que el mundo laboral es muy complicado. El discurso debe de ir dirigido a la originalidad por encima de cualquier cosa.
“El fracaso es tratado como un tema tabú. Cuando abres una empresa, no es tan fácil triunfar. (…) A los estudiantes hay que darles una visión de la realidad distinta, decirles que lo intenten pero también explicarles que pueden fracasar.”
E: ¿Crees que marcas o casos como el de Hemper deberían estudiarse más en las universidades?
MÁ: Al final, las universidades te enseñan mucha teoría, pero luego no aprendemos cómo afrontarnos al mundo real. Pienso que muchas veces en estas charlas que voy de emprendimiento en las universidades, se habla muy poco de medio ambiente y de derechos humanos. Se ha puesto el ejemplo de empresarios que han tenido éxito, como Amancio Ortega. Pero ese éxito ha sido a costa de otras cosas. En los mercadillos conozco a gente maravillosa que lleva a cabo proyectos de responsabilidad social y ecológica increíbles, pero que no tienen voz porque no han alcanzado un determinado éxito. Esto es algo que la gente se tiene que plantear.
Celia Ortega Torres